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Numerosos estudios y encuestas demuestran que las empresas que toman decisiones estratégicas basadas en los datos son más competitivas que las que no lo hacen.

Negocio y TI

Sabemos que tanto la parte de negocio como la parte de TI de una empresa son conscientes y coinciden en que la utilización de los datos supone numerosas ventajas para la toma de decisiones. Sin embargo, nos encontramos multitud de ocasiones en que las empresas no utilizan los datos de forma estratégica o no consiguen sacar el valor que esperan.

Evidentemente las causas son múltiples y cada empresa tiene sus particularidades, pero sin duda, una pieza clave de por qué no se consigue alcanzar las expectativas es la falta de alineación del área TI con negocio.

Analítica de datos

Cuatro realidades, cuatro medidas

Estas son algunas situaciones que evidencian lo comentado. ¿Qué podemos hacer al respecto?:

  1. El valor de los datos y el impacto de su uso en la toma de decisiones debe reflejarse en medidas concretas (indicadores clave), y esa medida es la cuenta de resultados.
    Una vez cuantificada la aportación a la cuenta de resultados, tanto negocio como TI deben conocer, entender y sentir como suyos los objetivos marcados y estar involucrados en la estrategia corporativa de los datos y lo que se espera que generen.
  2. El área de TI es normalmente el custodio de los datos y responsable de su calidad, recopilación, gobernanza, etc. En ocasiones, estas áreas están tan metidas en la propia gestión y administración de los datos que no tienen capacidad para responder con agilidad y en tiempo a determinadas necesidades de negocio.
    Para estos casos, desde TI deben implantar herramientas “self-service” que permitan a usuarios no técnicos, construirse a medida los informes con datos de múltiples fuentes que necesitan en cada momento.
  3. Los datos están. El área de TI se encarga de recopilar y almacenar gran cantidad de datos no sólo de los propios sistemas de la compañía, sino también del feedback del cliente, de proveedores y otras fuentes externas. Sin embargo, no se saca partido (o no todo el que se podría) desde negocio a toda la información que se dispone.
    Aparte de considerar los datos como un activo estratégico, tanto el área de TI como negocio deben participar en la estrategia corporativa de datos, y desde los estadios iniciales colaborar en la catalogación o inventariado de los mismos con la mente puesta en los objetivos que se pretende conseguir.
  4. El área de TI no comprende adecuadamente las necesidades ante una petición de datos necesarios para tomar decisiones de negocio.
    Los proyectos de analítica de datos deberían estar liderados por una persona de negocio, con conocimientos TI o por alguien de TI con conocimientos de negocio. Se debe fomentar la “formación” a las áreas de TI para que se vea el impacto que tiene su trabajo en el negocio.

Conclusión: El Equilibrio

El entendimiento o equilibrio entre el área de TI y negocio es un factor crítico que afecta al éxito o fracaso de un proyecto de analítica de datos, pero reflexionando sobre los puntos que hemos comentado podremos mitigar muchos riesgos y aumentar las probabilidades de éxito.

Tomás Pérez. Gerente de Cuentas.